martes, 27 de diciembre de 2011

Navidad en el Fuerte del Sombrero

     Hay una calle que diario tomo con mi auto, y que por coincidente y afortunada ubicación, deja libre la vista para observar por algunos segundos el Fuerte del Sombrero. En vísperas de Navidad, al mirar hacia el Nido de Águilas, me vino a la cabeza el pensar e imaginar como es que se festejaba tal fecha, y digo imaginar porque realmente no tengo una idea clara de como era realmente, nunca he leído algo al respecto. Sin embargo basandome en cosas ciertas y hechos históricos, puedo ayudar un poco a recrear alguna escena con mi imaginación.
  Fueron tres navidades las que se vivieron en el fuerte y sobre el entendido que en esos tiempos la religiosidad se llevaba con gran disciplina, me quedo con la idea de que de una u otra forma se hacía una celebración. Eran tiempos difíciles, para la primera navidad en 1814, imagino las dos campanas sujetas a una encina al centro del cerro, repicando llamando a misa de gallo dicha por el padre Don Guadalupe Díaz capellán de las tropas de Moreno ante la imagen de la Virgen del Refugio y un improvisado nacimiento de figurillas de barro, horas antes celebrado el último rezo del novenario que culminaba con el arrullo del "Niño Dios" y la entrega del aguinaldo (molote) imagino que con algunos dulces y muy lleno de frutas traídas de los huertos de Comanja y otras conseguidas en ese mercado nuevo que se formó en el cerrito llamado Del Rincón y rebautizado como Del Comercio.



La piñata habría sido una buena olla de barro adornada en forma de estrella, con papeles de colores y sus siete picos, los siete pecados capitales, y para quitarse un poco ese frío tremendo y ventoso que se siente ahí arriba, un rico ponche, atole, chocolate, champurrado preparados en ollas de barro sobre el fogón y acompañados de unos deliciosos tamales, buñuelos, quizás algún pozole, algunos guisos con pollo, cerdo, res, chivo, conejo o hasta venado. Cobijados todos bajo un cielo espectacular lleno de estrellas

foto tomada de demoleculasymas.blogspot.com


La tropa, gente de Los Francos, Los Pachones, Los Monigotes, gentes de todas partes de Jalisco, del Bajío, de partes más lejanas bailando y tomando un buen pulque o mezcal hasta el amanecer, todo con un dejo de melancolía al recordar la navidad pasada en el calor y tranquilidad de su hogar y su familia, aún así era una navidad alegre, la moral estaba levantada, eran los primeros meses defendiendo la causa, el fuerte, y aunque al inicio del levantamiento se había sufrido algún revés por parte de los realistas, los "panzas coloradas" del capitán Galdámez, ahora las cosas marchaban algo mejor: en el Ojo de Agua hicieron trizas a los panzas dejando muerto al mismo Galdámez en el campo de batalla. El Fuerte del Sombrero había probado su eficacia al rechazar al mismo Brilanti que ordenó su ataque desde la Mesa de las Tablas o Mesa de Brilanti como también se le conoció por éste hecho, además de que acababa de ser promulgada una constitución en apatzingan que se supone daría más fuerza y forma al movimiento.

Mesa de las Tablas o de Brilanti vista desde el Fuerte del Sombrero

      La navidad de 1815 sería algo diferente, la consternación, entre los defensores sería el sello predominante, las cosas ya no marchaban también como se esperaba,  la captura de la niña Guadalupe de dos años y medio hija de Don Pedro Moreno en manos de Brilanti desde Abril, así como la captura de Morelos en Noviembre,  mancharían la alegría de la festividad (aunque a decir verdad, no estoy seguro de que el día 24 ya estuvieran enterados del fusilamiento realizado el 22, la sentecia dictada por Calleja fue hecha el dia 20).

Fusilamiento de Morelos. Tomado de Bicentenario.gob.mx

     La navidad de 1816 sería la última en el Nido de Águilas, el estancamiento del movimiento por la falta de un lider real, la falta de organización entre cabecillas, la apatía de otros, dan casi por terminada la guerra a nivel general, sólo algunos medio organizados en la Junta de Jaujilla como don Pedro, el padre Torres, etc, mantienen viva la lucha en el Bajío. Aún así, esta navidad es especial, el Fuerte del Sombrero se llena de fiesta decembrina con la boda de la hermana de don Pedro: Nicanora con don Manuel Gónzalez. Este sería el último Diciembre en el Fuerte, lejos estaban de imaginar los eventos que les esperaban y mucho menos que para el siguiente año, nada de lo que veían sus ojos del Nido de Águilas, quedaría en pie.